El conejo Jasper ya no es un conejito. No tiene miedo de la oscuridad, y definitivamente no tiene miedo de algo tan tonto como la ropa interior. Pero cuando las luces se apagan, de repente sus calzoncillos brillan en la oscuridad. Un brillo verdoso y espantoso.
Si Jasper fuera miedoso diría que su ropa interior es un poco, bueno, espeluznante. Pero Jasper, obviamente, no tiene miedo y acaba con los espeluznantes calzoncillos. Pero después de intentarlo todo para deshacerse de ellos, ¡siguen volviendo!
Este álbum ilustrado, narra a la perfección, la curiosa historia de los calzoncillos nuevos del conejo Jasper con un toque de misterio y miedo que la hace muy atractiva para los pequeños lectores.
Las ilustraciones son bastante sencillas pero el uso de tan solo tres colores (blanco, negro y verde brillante) hace que se carguen de un significado especial y doten al cuento de más misterio si cabe.
Una historia que no podrás contar una sola vez porque a los niños les parece tan fascinante que quieren ¡otra vez!, ¡otra vez!... sin parar. (En casa el día que llegó el libro tuve que contarlo cinco veces seguidas)
El miedo forma parte del crecimiento personal de nuestros hijos. Cada niño tiene miedo a una cosa y lo manifiesta en mayor o menor medida dependiendo de su personalidad pero todos pasan por ello. Jasper, el protagonista de esta historia, tiene miedo de sus calzoncillos y muchos de los pequeños lectores se acaban identificando con "ese miedo" del personaje.
El final, tan magistralmente seleccionado por el autor, les da a los lectores esa paz que están buscando desde que comienza la historia y la poderosa idea de que aquellas cosas que al principio parecen negativas pueden convertirse en toda una ventaja en nuestras vidas.
Nos ha encantando pero sobretodo a Irene que va por casa gritando "Los Calzoncillos maléficos"
Nos ha encantando pero sobretodo a Irene que va por casa gritando "Los Calzoncillos maléficos"
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